El asma hace que las vías respiratorias se estrechen, se hinchen y produzcan más mucosidad. Esto puede dificultar la respiración y provocar tos, sibilancias y falta de aire. Dependiendo de la gravedad de la condición, puede ser una molestia menor o un gran obstáculo para las actividades diarias. Los ataques de asma pueden poner en peligro la vida. El asma puede cambiar y empeorar con el tiempo.

Los síntomas del asma incluyen:

• La falta de aliento
• Presión o dolor en el pecho
• Dificultades para dormir causadas por la falta de aire, tos o sibilancias.
• Un silbido o sibilancia al exhalar
• Ataques de tos o sibilancias que empeoran por un virus respiratorio, como un resfriado o la gripe

Los síntomas del asma suelen empeorar por una combinación de factores ambientales y genéticos, únicos para cada individuo. Estos pueden incluir:

• Alérgenos en el aire (como el polen, la caspa animal, el moho, las cucarachas y los ácaros del polvo)
• Infecciones respiratorias
• Actividad física (asma inducida por el ejercicio)
• El aire frío
• Contaminantes e irritantes en el aire (como el humo)
• Medicamentos (incluidos los betabloqueantes, la aspirina, el ibuprofeno y el naproxeno)
• Las emociones fuertes y el estrés
• Aditivos alimentarios (como sulfitos y preservativos)
• Enfermedad de reflujo gastroesofágico (ERGE), una condición en la que el ácido del estómago retorna a la garganta
• El ciclo menstrual

Medically Reviewed by:pdm

marzo 4, 2020

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